P. sirve torera

Lalala

P pasa del paro

y se convierte en camarera.

Lideresa,

polular,

sirve copas allá donde va.

Y si se mancha,

sigue en su lugar,

empina la botella con arte,

y OLÉ

P es mirada

P

cautiva,

que no guardian.

Recreamos la escena:

P se mueve con rapidez,

gesticula,

desplaza sus brazos,

sus manos.

Se impulsa hacia delante,

encorva su espalda,

la cabeza le acompaña.

Esta es la nueva faceta desvelada,

P conquista

y no castillos

Con su discurso,

convence.

Tiene labia.

Las miradas lo delatan.